Actividad Nº
1:
EPOC
La enfermedad pulmonar
obstructiva crónica (EPOC) es una de las patologías respiratorias más
prevalentes y comunes. En España se calcula que más de 2 millones de personas
sufren EPOC, aunque un 70 por ciento de ellas, es decir, 7 de cada 10 personas,
no están diagnosticadas y por lo tanto no reciben tratamiento.
La causa principal de
esta enfermedad crónica que no tiene cura es fumar: aproximadamente el 80 por
ciento de los pacientes con EPOC son o han sido fumadores. Sin embargo, esto no
significa que los no fumadores estén exentos de tener esta enfermedad, aunque
el riesgo es mucho más bajo.
“Cuando una persona
tiene EPOC lo que suele notar es la presencia de tos, expectoración y flemas.
El problema es que los pacientes no les suelen dar mucha importancia a estos
síntomas puesto que suelen achacarlos al tabaco y les van restando
importancia”, explica Patricia Sobradillo, neumólogo y miembro del Área de EPOC
de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ). “También hay
que tener en cuenta otros aspectos como la reincidencia de los catarros o, como
suelen contar ellos, cogen muchos catarros, pero no se los quitan en todo el
invierno”.
Sobradillo indica que
según va avanzando la enfermedad puede aparecer ahogo o falta de aire, que al
principio surge al hacer grandes esfuerzos, al cargar pesos o subir cuestas,
pero al cronificarse surgen estando en reposo.
“Cualquier persona, en
principio fumadora, que empiece a notar estos síntomas: tos, flemas, algo de
ahogo, carraspeo, catarro que no cura, debería acudir al médico”, apostilla.
Pasos para adaptarse a
la nueva situación
La EPOC es una
enfermedad relacionada con el tabaco. Es tan importante dejar de fumar para
evitar que aparezca, como una vez diagnosticada para impedir que vaya a más.
La experta indica que
en la actualidad existe un arsenal terapéutico bastante amplio para mejorar la
calidad de vida del paciente. Aunque insiste en dejar de fumar, en llevar una
vida activa y en ponerse la vacuna de la gripe.
“Yo siempre intento
transmitir un mensaje de optimismo: que tengas la enfermedad no quiere decir
que se acabe tu mundo, tienes que adaptarte a él y gracias a los avances puedes
tener una vida plena”, afirma Sobradillo.
La especialista da una
serie de pautas sencillas que permitirán a los pacientes mejorar su situación:
Alimentación
El primer consejo es
llevar una dieta equilibrada obviando las comidas que le puedan hinchar y las
bebidas gaseosas, ya que pueden provocar mayor sensación de ahogo.
“Nosotros solemos decir
que hagan cinco comidas a lo largo del día, no tres comidas muy copiosas, y que
en éstas se incluya mucha fruta y verdura. Hay que olvidarse de las legumbres y
evitar los alimentos que le puedan producir gases”, señala. Algunos de los
productos que pueden aumentar las flatulencias, además de determinadas
legumbres son la col y el pepino.
Respecto a los
líquidos, recomienda aumentar el consumo de lácteos por el aporte de calcio y
prescindir de la cafeína. Otras recomendaciones incluyen tener cuidado con la
sal porque estos pacientes suelen tener la tensión alta, evitar las grasas, las
comidas preparadas o las frituras. En lo que concierne a la carne y al pescado
es preferible que estén cocinados a la plancha o al vapor.
Deporte
¿Correr? ¿Las clases
colectivas de los gimnasios? ¿Qué deporte es mejor practicar si tenemos EPOC?
La especialista indica que andar posiblemente sea el ejercicio más completo.
Otro deporte aconsejado es la natación: a algunos pacientes les va muy bien
porque no incluye carga de peso.
“Solemos recomendarles
caminar o que compren una bicicleta estática para tener en casa, así como hacer
algo de pesas, porque es importante hacer ejercicios de brazos. Pero, sobre
todo, insistimos en la rutina, en que lo metan en su día a día, sean constantes
y que todos los días saquen un rato para hacer esos ejercicios, incluso
sabiendo que en algún momento les pueden provocar algo más de ahogo. En esos
casos tienen que utilizar su inhalador. Otro consejo es que sigan un trayecto
que conocen y que tenga bancos para poder pararse si lo necesitan”, añade.
Cambios en las rutinas
diarias
El ahogo es uno de los
síntomas más frecuentes y aunque al principio aparece sólo ante grandes
esfuerzos, la enfermedad va progresando y el ahogo se puede manifestar ante
situaciones que a priori no entrañan grandes esfuerzos.
El problema es que los
mismos pacientes no notan esos avances ya que son ellos mismos los que dejan de
realizar ciertas actividades. Por ejemplo, si se ahogan al subir cuestas dejan
de hacerlo para evitar ese esfuerzo.
“Es importante que
ellos identifiquen lo que están dejando de hacer e intentar adaptarlo porque
ante todo, no deben sentirse limitados y es preferible que continúen con sus
hobbies. Lo importante es ir conociendo la enfermedad y llevar siempre la
medicación de rescate a mano”, insiste.
La especialista indica
que a la hora de vestirse, si la enfermedad está muy avanzada y les cuesta,
pueden incluir modificaciones en su rutina que les facilitarán el día a día,
como vestirse sentados, no agacharse para ponerse los zapatos, subir el pie y
utilizar calzador u optar por zapatos sin cordones y con velcro.
La higiene es otro
aspecto que puede acarrear problemas ya que el baño está cerrado, propicia que
aumente la condensación y con ello la sensación de ahogo. Ante estas
situaciones recomienda adaptarlo para poder sentarse durante el momento de la
higiene.
Actividad Nª 2
1) Esquematice las partes de un sistema respiratorio y
trate de determinar en qué lugar se produciría el EPOC
2) ¿Cuáles son las barreras de defensa del sistema
respiratorio? Explique
3) En el caso de un fumador ¿Qué ocurre con el humo del
cigarrillo? ¿las células se afectan?
4) ¿Por qué es importante el deporte en estas
situaciones?
5) Es reversible la enfermedad ¿Qué rol cumple la alimentación?
6) ¿Por qué vacunarse contra la gripe? Fundamente.
Actividad Nª 6
1) ¿Cómo relaciona el sistema circulatorio con el sistema
respiratorio?
2) ¿Qué función realiza el sistema respiratorio?
3) Describa el recorrido del aire y las diferentes vías
que recorre? ¿Qué ocurre en cada sector?
4) ¿Cómo se conforma? Describa cada componente
5) ¿Por qué ante un ejercicio o susto aumenta el Nª de
latidos por minutos?
6) ¿Cuántos latidos por minuto tiene en este momento?
¿Cuánto tiene al dar una vuelta a la manzana?
7) ¿Cómo viajan los nutrientes a las diferentes células?
8) ¿Qué relación encuentra entre este sistema y el
sistema urinario?
9) ¿Qué es la hematosis? ¿En dónde se produce?
Esquematice.
Actividad Nº 3. Lectura del siguiente artículo
Actividad Nº 3. Lectura del siguiente artículo
¿Qué
es la infección urinaria?
La infección de orina está provocada por la invasión de
microorganismos en el tracto urinario. Puede producirse por dos vías
diferentes: por el extremo inferior de las vías urinarias (abertura en la punta
del pene o de la uretra, según se trate de un hombre o de una mujer), que es el
caso más frecuente; o bien a través del flujo sanguíneo, en cuyo caso la
infección afecta directamente a los riñones.
Las infecciones de las vías urinarias más habituales son
las producidas por bacterias, aunque también pueden presentarse a causa de
virus, hongos o parásitos. De muchas de ellas es responsable la bacteria
llamada Escherichia coli, que normalmente vive en el intestino. Infección de
orina o del tracto urinario son expresiones que engloban diferentes
enfermedades infecciosas (producidas por un microorganismo o germen) y que
afectan a cualquier parte del sistema urinario (riñón, uréteres, vejiga
urinaria o uretra).
¿Quién puede padecer cistitis?
Cualquier anormalidad que provoque una obstrucción del
flujo de orina (piedras en el riñón, estructuras anómalas, etcétera,) puede inducir
a una infección urinaria.
Una próstata dilatada puede frenar el flujo de orina, por
lo que incrementa el riesgo de infección.
Las personas
sometidas a exámenes mediante tubos o catéteres o que necesitan sondas pueden
desarrollar más fácilmente infecciones procedentes de dichos instrumentos.
Los mayores se ven afectados por este tipo de infecciones
con mayor frecuencia, así como las que sufren una disminución del sistema
nervioso, que les impide controlar la vejiga a voluntad.
Por otra parte, cualquier desorden que produzca una
supresión en el sistema inmune incrementa el riesgo de sufrir una infección
urinaria, ya que este sistema es el encargado de mantener a raya los
microorganismos patógenos responsables de las infecciones.
También se dan en bebés nacidos con alguna deformación del
tracto urinario, que a menudo han de ser corregidos mediante cirugía.
Causas
La causa más frecuente en los varones, de infecciones a
repetición, es una infección bacteriana persistente en la próstata. Las mujeres
contraen con frecuencia infecciones de la vejiga después de una relación
sexual, probablemente porque la uretra ha sufrido contusiones durante la misma.
En casos muy particulares, las infecciones repetidas de la vejiga en las
mujeres son originadas por una conexión anómala entre ésta y la vagina.
Evalúa tus síntomas
El cuadro clínico de la cistitis puede variar en función de
la zona en la que se presente la infección. Estos son los síntomas más comunes
de la infección de orina:
·
Necesidad urgente y frecuente de orinar.
·
Picazón o quemazón en la uretra al orinar.
·
Enrojecimiento de la vulva y picor vaginal (en
las mujeres).
·
Dolor al orinar y en las relaciones sexuales.
·
Color turbio, lechoso (espeso) o anormal de la
orina.
·
Aparición de sangre en la orina.
·
Fiebre y escalofríos (la fiebre puede
significar que la infección ha alcanzado los riñones).
·
Vómitos y náuseas.
·
Dolor en el costado o espalda (indica infección
en los riñones).
·
A menudo, las mujeres sienten una ligera
presión por encima del hueso púbico y muchos hombres sienten una dilatación del
recto.
·
Estar más irritable de lo normal.
Los síntomas infantiles, por su parte, pueden confundirse
con otros trastornos; además, los pequeños se encuentran ante la dificultad de
no saber expresar qué les pasa. No obstante, si un niño presenta una infección
urinaria puede manifestar los siguientes indicios:
·
Estar más irritable de lo normal.
·
No comer como lo hace normalmente.
·
Tener fiebre sin motivo aparente que además no
acaba de desaparecer.
·
No poder aguantarse la orina.
·
Sufrir alteraciones en su desarrollo.
·
Estar más irritable de lo normal.
·
No comer como lo hace normalmente.
·
Tener fiebre sin motivo aparente que además no
acaba de desaparecer.
·
No poder aguantarse la orina.
·
Sufrir alteraciones en su desarrollo.
Prevención
Seguir una dieta equilibrada y llevar un estilo de vida
saludable pueden ayudar a prevenir una infección urinaria; también es
recomendable no retener la orina y beber agua de forma habitual, al menos dos
litros diarios, ya que esto favorecerá la diuresis.
En el caso de las mujeres con menopausia, utilizar una
crema de estrógenos es eficaz a la hora de reducir las posibilidades de
contraer una cistitis.
Otros consejos específicos para reducir el riesgo de
cistitis en mujeres son:
Orinar después de cada coito para eliminar posibles agentes
infecciosos.
Evitar la ducha vaginal como método para reducir la
posibilidad de embarazo.
Cambiarse el bañador después de cada baño y evitar el frío
en la zona.
Tener precaución con algunos preservativos, cremas
espermicidas o el diafragma, ya que no son recomendables para personas
propensas a padecer infecciones urinarias. En este caso, se aconseja acudir al
especialista para adoptar un método anticonceptivo diferente.
Utilizar cremas lubricantes durante las relaciones
sexuales: La irritación vaginal postcoital es una causa muy frecuente de
infección en la vejiga; el uso de lubricantes es una forma eficaz de evitar el
roce y, por lo tanto, posibles infecciones.
En el caso de los bebés y niños, es importante cambiar los
pañales de forma frecuente, así como instruir a los niños en los hábitos
higiénicos que deben realizar después de haber orinado o defecado.
Tipos
·
Bacteriuria: Es la presencia de bacterias que
aparecen en un análisis de orina.
·
Infecciones de tracto urinario inferior: Son de
varios tipos. La cistitis se produce en la vejiga, mientras que la uretritis se
localiza en la uretra. En el caso de los hombres, la infección urinaria puede
producirse en la próstata (prostatitis) o en los conductos encargados de la
producción y excreción del semen (orquiepididimitis).
·
Infecciones de tracto urinario superior: Se
denomina así a otro tipo de infecciones más graves, como la pielonefritis aguda,
que afecta a los riñones.
·
Infecciones urinarias no complicadas: Son
infecciones banales que no presentan otras patologías, como la cistitis o
pielonefritis.
·
Infecciones urinarias complicadas: Cuando
existen otras patologías como alteraciones metabólicas, inmunodepresión o la
aparición de patógenos inusuales. Pueden afectar tanto a niños como a mujeres
embarazadas y hombres.
·
Infecciones urinarias recurrentes: Son
infecciones que vuelven a aparecer causadas por el mismo microorganismo o por
otro.
·
Infección urinaria crónica: La infección
urinaria se cronifica cuando no termina de desaparecer a pesar de los
tratamientos.
Diagnóstico
Las pruebas y análisis que tendrán que realizarse al
paciente con cistitis dependerán de la zona donde se presume que radica la
infección y de los síntomas que éste padezca. Algunas de las pruebas más
generales son las siguientes:
Examen físico: El médico palpa la zona abdominal y pélvica
del paciente para detectar los lugares con dolor o con enrojecimiento.
Análisis de orina: Con una muestra de orina del paciente se
examina si ésta contiene algún agente infeccioso (germen nocivo).
Cultivos de orina, líquido vaginal o líquido uretral: Se
siembra una gota de algunos de estos líquidos en una placa con nutrientes para
bacterias y, después de transcurridas varias horas para que éstas crezcan, se
determina qué tipo de bacteria es la causante de la infección y qué
antibióticos pueden resultar efectivos (antibiograma).
Citoscopia: Consiste en introducir por la uretra un tubo
provisto de lentes y luz para observar directamente el estado de la uretra y la
vejiga urinaria.
Ecografía abdominal: Es un estudio indoloro del abdomen que
se realiza mediante ultrasonidos que forman una imagen en un monitor.
Urografía: Es una radiografía del riñón, para la cual hay
que inyectar previamente una sustancia que creará un contraste y el riñón podrá
ser observado con facilidad.
Actividad 4:
1)
Describa las partes del sistema urinario
2)
Marque posibles zonas afectadas en procesos infecciosos
3)
¿Qué relación encuentra entre la alimentación y
este sistema?
4)
¿Qué ocurre si la infección no es tratada?
¿Quién es el agente?
5)
¿Qué relación encuentra con sistema
respiratorio y circulatorio?
6)
¿Explique la función de la nefrona?
7)
¿Qué significa el término homeostasis?
Bebidas Energizantes
“Autoridades estadounidenses revelaron que se investigan
reportes sobre muertes de personas que consumieron las bebidas
energizantes de la empresa Monster Beverages, publicó
la agencia AFP.
La bebida Monster Energy Drink, popular entre los jóvenes,
ha sido vinculada con cinco muertes, publicó la agencia AFP.
Hay otros casos de personas que presentaron reacciones
adversas luego de consumir la bebida, que contiene 240 miligramos de
cafeína, siete veces la cantidad hallada en una Coca-Cola”.
La adolescente Anais Fournier, quien murió
después de consumir dos latas de Monster Energy de 709 mililitros en un
espacio de 24 horas y sufrir un paro cardíaco, se suceden una detrás de otra.
Responde:
a)
¿Se debería prohibir la venta de bebidas
energizantes?
b)
¿Crees estar en la situación mencionada?
c)
¿Qué efectos producen las bebidas energizantes
sobre los sistemas vistos?